El nuevo sistema constructivo románico toma elementos de los romanos e incluso de los normandos aunque cuenta con localismos fundamentalmente en la decoración y en su simbología.

El nuevo sistema constructivo románico toma elementos de los romanos e incluso de los normandos aunque cuenta con localismos fundamentalmente en la decoración y en su simbología.
Las iglesias y monasterios Románicos son los principales referentes de la arquitectura del siglo XI y XII, encontrándose en ellos las principales características constructivas del período, pero también referencias a la forma de vivir y sentir la religión de cada pueblo.
La arquitectura románica floreció durante la Edad Media. Logró cruzar fronteras y expandirse por Europa gracias a las peregrinaciones de los fieles.
El gótico inglés surgió alrededor de 1180 y marcó la forma de construir por más de tres siglos, aun cuando en Florencia ya se había introducido el estilo renacentista.
El estilo manuelino habla de Portugal como ningún otro movimiento arquitectónico. Forma parte de la riqueza y gloria nacionalistas relacionada con la Era de los descubrimientos.
La arquitectura gótica nació en Francia de la mano de las reformas religiosas del abad Bernardo de Claraval. Estas dieron a los maestros constructores un nuevo objetivo: elevarse a los cielos para estar más cerca de Dios.